viernes, 17 de agosto de 2007

Comunicologa tiene sobrepeso

Sé que es síntoma de esquizofrenia hablar de uno mismo en tercera persona, pero es que es la única forma de afirmarlo sin que me afecte y me den ganas de volverme bulímica y no levante la cara de mi bonito w.c. de diseño.
Resulta que, hasta la fecha, yo ya venía notando cómo se instalaban en mi, cual okupas de esos que joden y no de los que dan cursos gratis de manualidades a los niños, unos kilos de más que hacían que mis curvas fueran aun más curvas y, por lo tanto, más femenina, claro. Sin embargo no me había percatado de la magnitud del problema, porque lo cierto es que siempre tiendo a achacar la responsabilidad a otros cuando en realidad es mía. Es un mecanísmo de autodefensa básico, pero funciona. Hubiera dado un pié defendiendo que la culpa era de la lavadora, por aquello de que es vieja o bien que utilizo el suavizante marca Día, por un error de esos que no volveré a cometer. Sin embargo, la verdad me explotó en mis carnes sin tapujos hace dos míseros días, en el simple gesto de quedar para ver a una apreciada amiga que hacía ya cosa de seis meses que no veía.
Mi amiga -le vamos a denominar Nutricionista, que esa es su formación, porque ya sabemos que nombrar a la gente por su nombre en internet a veces es peligroso- trabaja en un gimnasio femenino donde te asesoran para perder los quilos que te sobran mediante una tabla de ejercicios. Como fuí a verla trabajar caí en la trampa de pesarme, supongo que por defecto profesional por su parte y curiosidad por la mía pues creo que debía de hacer cosa de un año que no pisaba una báscula. El resultado fue horrible, aproximadamente 8 kilos más que la última vez que me pesé! y para culmen me hizo la prueba para el índice de masa corporal que trata de agarrar una maquinita poniendo los pulgares en unas asas metalizadas donde un jodido muñeco cruel te dice si estás en low -medium o Too Hig, como es mi caso, con casi 28 puntos.
No es justo, yo vivía feliz con mis brazo de señora de pueblo pero con mi sentimiento de anorexia inversa que tan poca vergüenza me ha proporcionado siempre pues, aunque esté metidita en carnes no lo asimilo y yo siempre me veo mona y sexy, para qué mentir.
Nutricionista me ha dado recomendaciones para una comida sana y me ha buscado la dirección de un gimnasio de su cadena en mi ciudad/pueblo/barrio, ( qué coño es Valdemoro?) que buena es, no me la merezco como amiga.
Espero que la fuerza de voluntad no me falle, pues ahora que me ha puesto a dieta Nutricionista no puedo fallarla y convertirme en su amiga la gorda en lugar de su amiga la comunicóloga.

domingo, 5 de agosto de 2007

Bilis Negra

Hoy es el primer día que despierto con lluvia en mi nueva ciudad. Algo parecido al olor del café recien hecho ha inundado las habitaciones de mi reciente, y casi virginal, casa. He oido el ruido de las gotas chocando y eso me ha llevado a abrir con ansia las ventanas.
Me he sorprendido respirando profundo. La capacidad pulmonar que había perdido con la asquerosa ola de calor ha vuelto. No le guardo rencor, ha avuelto que es lo que cuenta. Y de pronto se me han ido los agobios. Ya no deseo romper mis cuatro platos en la cabeza cercana de nadie, ya no deseo salir a correr hasta que me mate el asma, ya no deseo colgar el cartel de SE Vende o Se Alquila o Se Cambia por media barra de pan y un libro para darle un final dignamente lorquiano a mi independencia.
Descbro que el olor parecido al café recién hecho lo produce la naturaleza que me rodea, la tierra, los árboles. Y esto es algo totalmente nuevo para mí pues hasta el momento, en Orcasitas los días de lluvía olían a calle mojada, se mojaban las baldosas del suelo, los cubos de basura, los yonquis, los hierros, pero no olía a campo mojado, y me gusta.
Otra cosa que vuelve con cada día de llúvía es la melancolía o lo que es lo mismo, la inspiración. La ganas de bomitar lo que se va acumulando dentro con cada experiencia que tengo. He probado a meterme los dedos hasta la garganta pero solo sirve para expulsar bilis y alimento no le viene nada bien a mi maltratado estómago.La melancolía sigue dentro. Hasta que viene un día de lluvía o me bien me quedo sola. Entonces es cuando me llena la cabeza de palabras, de letras, de más palabras.
Mi hermano me pregunta de vez en cuando si sufre por que es artista, si está condenado a tener esa forma de ser triste, melancólica. Mi respuesta siempre es sí. Tal vez no lo sepa o talvez sí, pero ya los griegos pensaban que la definición del caracter de una persona se formaba con la mezcla de los cuatro humores básicos, sangre, flema, bilis y bilis negra y según predominase una u otra daban como resultado una personalidad sanguínea, flemática, colérica o melancólica. Decía Aristoteles que "Todos los genios son melancólicos", pues la melancolía o bilis negra hace que la persona sea débil frente a las emociones y más perceptivas al mundo de las experiencias. Por ello, como dice José Antonio Marina en su Anatomía del Miedo, "Los genios - Los artisitas - están mal dotados para la vida. En cambio, a los sanguíneos que disfrutan de los placeres, se les considera personajes simples y sin interés".
Prefiero sufridores melancólicos a toparme únicamente con gente simple y sin interés.

jueves, 2 de agosto de 2007

Moribundo y lo que todos sabiamos

Sí, soy consciente de que llego demasiado tarde para aquellos lectores-adoradores-deboradores del blog de Moribundoporelarte de quien, a estas alturas, ya todos sabéis que se trata de mi hermaníssimo y que yo encarno y doy pié a las historias de 'Comunicóloga' en sus post (por cierto, me encanta mi nombre en tu blog!).
Nunca pude entender el ánimo que mi hermano volcaba en mí de forma continua para que me decidiera a escribir un blog, un ánimo que creo duró cosa de dos años más menos hasta que finalmente lo hice. Y es que nuestras conversaciones siempre han sido divertidas a la par que cultas, con merecimiento de estar disponibles para el público, ya sea en un programa de monólogos, en la sección consejos sobre sexo de Cosmopolitan o en un blog. Yo sabía que él mantenía algún extraño tipo de relación con y por la web que, por similitud verborrea quería que yo hiciera también.Sin embargo, pude entenderlo todo de forma plena cuando el móvil me sonó una noche y descolgué con confianza al ver que era mi amiga japonesa (de la que ya queda constancia de que no desea ver su nombre propio en internet) Mi amiga, un tanto nerviosa, me vino a decir lo siguiente:
"Comunicóloga, si todavía te quedaba alguna duda de la orientación sexual de tu hermano, te voy a decir algo que te la va a quitar", a lo que yo le contesté "¿duda? Crees que un tío heterosexual se haría con la colección prácticamente completa de las bratz??" Aun así, como no existía prueba feaciente que confirmara lo que ya todos sabíamos (bueno, todos me nos mi padre) le pedí que continuara contándome. "Ya sabes que hago búsquedas en Google con mi nombre para ver si se dice algo sobre mí..." comentaba mi amiga, que, aunque parece un extraño vicio, nada mejor para enterarte de todo lo que quieres y no quieres saber, "... y he descubierto un blog que escribe tu hermano donde cuenta cómo pierdo la virginidad!! y como pierde la suya! varias veces!" "AHHH!!!, Qué escándalo!!" Sólo mi amiga y yo, bueno... y el chico en cuestión, conocíamos estos hechos, con pelos y señales, me refiero! Por suerte mi hermano contaba algunas cosas que no se ajustaban a la realidad, por lo que me ví salbada de la bronca que ya veía venir sobre mí por parte de mi amiga que, por supuesto, pensaría que yo se lo había contado en esas conversaciones en plan aquelarre en nuestra habitación, donde hemos descuartizado a todos bicho viviente "Aghhh..." Pensé "Que me quedo sin amiga japonesa por una jilipollez!". Por suerte, como digo, este blog no hizo que nos alejáramos sino que nos lleváramos aun mejor gracias a una complicidad de "ahora solo nosotras dos sabemos lo que ha pasado Amiga Japonesa, quiéres que se lo cuente a mi hermano?" Un rotundo NO fue su respuesta, pero solo por pura vergüenza y por temor a que una vez que yo descubriera a mi hermano, esto le pudiera sentar mal y no volver a hablarme, por lo que Amiga Japonesa sería una rompefamilias!. Nada más lejos de la realidad.
Tras un largo tiempo en el que Mi Amiga Japonesa estuvo haciendo búsquedas de su nombre propio, volvió a telefonearme para contarme que había vuelto a descubrir su nombre en el blog de Moribundo y que ahora quería venganza. No fue dificil convencerla de que debíamos decírselo, así que así lo hice una relajada noche en el sofá, delante del televisior encendido y con mi madre lobotomizada por las ondas audiovisuales. Yo reconozco, podía haber empezado la conversación con algo así como "No te enfades moribundo pero Japonesa ha descubierto esto...."o " ¿Sabes quién es gay?" Sin embargo me bastó decir que Japonesa había buscado su nombre en internet y había encontrado algo MUUUUUUY INTERESANTE. Entonces fue cuando llegó el momento crack para mi hermano. Ese momento en el que se te desencaja la mandíbula y te cruje hasta el coxis porque se ha decubierto el pastel que tan celosamente guardabas para comertelo tu solito. JA! Pillado. Creo que, a juzgar por sus expresiones, se le debió de pasar por la cabeza taparme la boca con cinta de embalar, asesinarme y tirarme al manzanares para que no pudiera contárselo a nadie, pero, como buen artista recapacitó, pensó en cortarse las venas, volvió a recapacitar y seguimos hablando sobre el tema para llevarlo algo mejor. Después de esto ya sabéis lo que pasó por que Moribundo lo relata muy bien en su blog.
Para mí los resultados de esta cadena de actos han sido satisfactorios, pues mi hermano y yo, ahora podemos hablar de sexo sin que la conversación sea un contínuo monólogo por mi parte de "pues cuando le mordí esto a David no sabes como se puso" o bien, que las intervenciones de mi hermano ahora tienen nombre de con quién, cómo y cuándo y no "Comunicóloga, has hecho esto alguna vez?, ""No, y tú?" y que su respuesta ya no sea "Ajajajajajaj,ajajaja..... solo te digo que duele."
Si lo sé se lo digo antes.